Se centra en la instalación de un piso básico de financiamiento y en la creación de una estructura de gobernanza interministerial, destinada a garantizar la sostenibilidad de las acciones de prevención del suicidio en el país.
El 10 de septiembre ingresó al Senado el Boletín N° 17832-11 que establece un marco legal integral para la prevención del suicidio y la promoción de la vida.
La iniciativa tiene como finalidad crear una ley que establezca un marco normativo en esta materia, incorporando mecanismos de prevención, intervención, postvención y acompañamiento a nivel nacional.
Para su implementación, se contempla la creación del Fondo Nacional de Prevención del Suicidio, con un presupuesto inicial de $5.000 millones de pesos chilenos como base. Este Fondo financiará los centros Refugio, programas y centros de prevención y acompañamiento, además de la capacitación de profesionales, líderes comunitarios y religiosos. También respaldará campañas de prevención, comunicación pública responsable, investigación aplicada, evaluación y el funcionamiento del Observatorio Nacional.
Entre los principales ejes del proyecto se encuentra la implementación de programas educativos en salas cuna y establecimientos escolares, destinados a fomentar habilidades socioemocionales, autogestión emocional, resolución de conflictos, hábitos de vida saludable y ejercicio físico, promoviendo así la resiliencia desde la infancia.
Asimismo, se propone la creación de refugios en todas las regiones del país, orientados a la atención directa de adolescentes y jóvenes. Estos espacios ofrecerán apoyo psicológico, social y educativo, funcionando como lugares de acompañamiento seguro y recuperación, en articulación con redes comunitarias y sistemas educativos, sin requerir modificaciones legales de iniciativa exclusiva.