En la actualidad, la producción de textos jurídicos ha alcanzado un nivel sin precedentes, lo que en principio podría considerarse una buena noticia para el avance del derecho. Sin embargo, es importante preguntarse cuál es la calidad y relevancia de las publicaciones que se están generando y qué impacto real tienen en la práctica jurídica y en la sociedad en general, revistas predatorias mediante.
En muchos casos, las publicaciones en derecho parecen centrarse en temas muy específicos y técnicos, que pueden ser de interés para un grupo reducido de especialistas, pero que tienen poco o ningún impacto en la práctica jurídica o en la sociedad en general. En otras ocasiones, las publicaciones se limitan a reproducir y reiterar ideas y teorías que ya han sido ampliamente discutidas y analizadas, sin ofrecer nuevas perspectivas o enfoques.
Además, en algunos casos, la producción de textos jurídicos parece estar más enfocada en la obtención de méritos y reconocimientos académicos que en la búsqueda de soluciones a los problemas jurídicos y sociales. No pocos académicos se enfocan en producir una gran cantidad de artículos, incluso en detrimento de la calidad y la originalidad de los mismos, para cumplir con las exigencias de publicación y avanzar en sus carreras académicas, aún a este precio.
Por otro lado, es importante considerar la compleja accesibilidad de varias de las publicaciones jurídicas especializadas. Esta falta de acceso puede tener un impacto negativo en la relevancia de la publicación en la práctica jurídica.
En conclusión, la producción de textos jurídicos en la actualidad está, por desgracia, más enfocada en la obtención de reconocimientos académicos que en la verdadera búsqueda de soluciones a los problemas jurídicos y sociales. Es importante a mi juicio que los académicos en derecho se enfoquen en generar publicaciones de alta calidad y relevancia, con un enfoque en la solución de problemas reales, en lugar de simplemente de enfocar sus energías a cumplir con los requisitos de publicación y acumular de ese modo méritos académicos que les permitan promocionarse en su respectiva Universidad. Finalmente, desde luego es necesario garantizar que las publicaciones jurídicas sean accesibles y relevantes para la práctica jurídica y la sociedad en general. De lo contrario nunca se recuperará el rumbo perdido por la dictadura estadística y puramente cuantitativa de las publicaciones de “alto” impacto, que ha transformado una labor crucial de la universidad en una industria usada por algunos sin ningún tipo de escrúpulos.