Así, se busca disminuir el delito conocido como “marcaje”, que usualmente se lleva a cabo a la salida de los bancos.
El pasado 13 de julio, ingresó a la Cámara de Diputados el Boletín N° 15.199-25, proyecto de ley que impone la obligación de contar, en las cajas de todos los bancos e instituciones financieras, así como en cajas de compensación, con un biombo que otorgue privacidad en las operaciones a realizarse ante ellos.
Con esto, se busca ir en auxilio del reservado y necesario ámbito de resguardo para desarrollar con calma la actividad por la cual se concurre ante dichas instituciones, ayudando a aminorar los delitos asociados a perpetrarse a la salida de tales recintos.
Este delito, conocido como “marcaje”, consiste en que individuos coludidos que efectivamente marcan -principalmente en algún lugar de las ropas de las posibles víctimas- o graban -con celulares- a un cliente en una operación determinada para luego dicha marca o dicha imagen que pueda captarse de él, sirva de base de alerta criminal o sea enviada a quienes se encuentran en asociación delictual, y las perciba o reciba, siendo esa marca o esa grabación la señal esperada para cometer ya afuera el delito de robo en todas sus formas.
En definitiva, el proyecto plantea que toda institución bancaria o financiera, además de las Cajas de Compensación, deberán contar en sus cajas de atención al público, con biombos separadores semicerrados, de techo a suelo en forma de “L”.
Además, se propone que estos biombos estén fijados contrarios a las filas de usuarios que aguarden a ser atendidos, y que aseguren totalmente la privacidad de la operación del usuario para con el personal de caja de los recintos.