27-04-2024
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Natalia González: “Tenemos la disposición a seguir presente en este proceso guardando prudencia de que esta es la etapa del Consejo”

Para la comisionada, la segunda etapa de trabajo junto al Consejo Constitucional será principalmente asesorar y colaborar con el principal órgano constituyente.

Para indagar más sobre el trabajo realizado en los últimos tres meses por la Comisión Experta, Actualidad Jurídica conversó con Natalia González, abogada y parte de la subcomisión de sistema político dentro del órgano constitucional, quien habló sobre los cambios más significativos en materia de Poder Judicial y partidos políticos presentes en el anteproyecto.

Termina esta primera etapa de trabajo en la Comisión Experta. ¿Cómo analiza el trabajo y el anteproyecto que será entregado al Consejo?

Me parece que es un trabajo que refleja bien nuestros consensos y también nuestros disensos; sobre todo en la forma en cómo trabajamos esos disensos. En varias normas es bastante evidente que partimos en posiciones muy diferentes, y en muchas de ellas llegamos a encontrar algún punto de encuentro. En las que no, y donde hubo vacíos, uno tiene que tener la humildad suficiente para señalar que hay otra etapa en este proceso y que ojalá esos vacíos sean llenados razonablemente por el Consejo Constitucional. No hay que minimizar las diferencias, sino, más bien, transparentar que no llegamos a consensos y que de forma transversal en el proceso que viene puedan llegar a un posible acuerdo.

¿Esos disensos se ocasionaron debido a las bases constitucionales o a aspectos más técnicos?

La lectura que hago sobre nuestros disensos como Comisión Experta y donde no pudimos arribar a soluciones en que ambas partes nos parecieran razonablemente aceptables, fue más bien porque existía un trasfondo político. Por ejemplo, en temas de libertad de elección en salud, hoy día las bases prevén que los derechos sociales puedan ser provistos tanto por instituciones públicas como por instituciones privadas. Sin embargo, en el derecho de la salud, se hizo un tema respecto del nivel del asegurador. Había acuerdo en el nivel del prestador, pero no hubo acuerdo en el nivel del asegurador y pienso que eso es un desacuerdo más político.

¿Cuáles fueron los temas más complejos en la subcomisión de sistema político?

Los disensos se produjeron en sí íbamos a ser capaces o no de hacer alguna otra reforma al sistema electoral, más allá del umbral, y que finalmente no prosperó. Nosotros por el lado de los comisionados de oposición, queríamos reducir la magnitud de los distritos con que se eligen a los diputados; hoy día es de tres a ocho y nosotros queríamos llevarlo de tres a cinco. Por el otro lado, ellos querían un sistema de listas cerradas sin pacto, pero tampoco consiguieron la mayoría para eso. Otro tema también debatido fue sobre el cómo los pueblos indígenas pueden participar en el Congreso Nacional, donde se terminó desechando la idea de los escaños reservados y se puso una suerte de principio para el legislador- que yo no concurrí con mi voto hacia aquello- pero el resto de la comisión sí, y después la Comisión Experta lo ratificó.

¿Cuál es la relevancia del umbral del 5% para que  los partidos políticos puedan tener representación en el Congreso Nacional?, ¿esto ayudará a una menor fragmentación en el Congreso?

Estuvimos de acuerdo prontamente en que la fragmentación en el parlamento no era adecuada para la gobernabilidad, y acordamos en el umbral nacional de entrada para que los partidos políticos puedan acceder a escaños en la Cámara de Diputados. Lo mismo ocurre en la elección de los parlamentarios, donde se lleva a cabo en la segunda vuelta presidencial. Esto lo hicimos con bastante facilidad. En general, teníamos bastante consenso en cómo mejorar el funcionamiento del Congreso, la eficacia de las urgencias, los problemas que podían estar presentando ciertos vetos, etc. También en el capítulo de gobiernos locales y regionales tuvimos muy pocos disensos, en general había un objetivo común y herramientas muy similares.

En ese sentido ¿podría generarse un nudo dentro del Consejo Constitucional y ser modificado?

Yo pienso que no. Al contrario de lo que se podría pensar, hay un consenso bastante transversal, salvo de los partidos más pequeños, en que es necesario establecer esta medida. De hecho, para legitimarla aún más, introducimos dos alternativas: una es del texto permanente; o alcanzas ese 5% como partido o alcanzas un total de ocho parlamentarios entre los que se eligen en la Cámara de Diputados, más los senadores en ejercicio  de ese partido que no van en esa elección. Esa cantidad de parlamentarios da cuenta de un partido que es más o menos robusto y que debiera tener presencia en el Congreso Nacional.

¿Cuáles son los principales cambios en justicia constitucional y función jurisdiccional?

Hay cambios en el número de miembros de la Corte, pasan a ser impares y la forma en que se designa. Ahora hay una suerte de partición en la forma que se elige; hoy tenemos los nombramientos del Presidente de la República, el Congreso y el Poder Judicial. Ahora, se produce una mixtura entre los tres poderes del estado para designar a los miembros de la Corte Constitucional, y eso a mi me parece una buena noticia. Pienso que todo esto encamina a tener un Tribunal que goce de mayor legitimidad y de mayor respeto técnico.

En lo personal, hay cambios negativos respecto de la revisión de los proyectos de ley. Se estableció un control preventivo formal y un control rápido respecto de cuando el parlamento vulnera la iniciativa exclusiva del Presidente de la República. Otra consulta difícil para mí de comprender fue que, en el control preventivo formal por una vulneración a un vicio del procedimiento del proceso de formación de la ley, la Corte se tiene que pronunciar por dos tercios de sus miembros, y me parece que es un quórum elevadísimo para una cuestión que, en realidad, es constatar una infracción formal. Entonces, de alguna manera, eso revela una cierta desconfianza de la CE hacia lo que va a ser la futura Corte Constitucional, lo que no refleja una señal positiva.

¿Cómo resolvió la Comisión la “tensión” entre el Estado social y democrático de derechos y el principio de subsidiariedad?

El capítulo primero del fundamento del orden constitucional, combina de manera bastante sensata la idea de un Estado social de derecho con la idea de una sociedad donde los principales motores del desarrollo propio y el progreso son las personas y los grupos o sociedades que esas personas forman para poder conseguir los fines que se proponen. En este primer artículo, está la idea de la dignidad humana como una idea fuerza y después está el que se organiza como un Estado social de Derecho en función a esa dignidad que la antecede. Es un orden adecuado que refleja la importancia que, en este caso, este anteproyecto constitucional le da a la persona. Después está el reconocimiento de los cuerpos intermedios, de su autonomía, que el Estado debe reconocer esa autonomía y que viene a cerrar esta idea de que el Estado está al servicio de la persona, pero no se vale por sí mismo, sino que también recurre a los intermedios de la sociedad y que por supuesto tienen que cumplir con ciertas regulaciones específicas.

¿De qué manera la Comisión Experta seguirá trabajando en paralelo con el Consejo Constitucional?

Ahora pasamos a ser asesores y colaboradores de este Consejo electo. Todos los comisionados expertos con los que he podido conversar tenemos la mejor disposición de actuar en ese carácter; primero hablando con los consejeros que están más cercanos al ideario político de uno, explicarles por qué están las normas que están en el anteproyecto, cuáles son las discusiones que se dieron, cuáles son las mejoras que creemos que hay que realizar, etc. Después, obviamente estar disponibles para otros consejeros que también quieran intercambiar opiniones con nosotros. Además, tenemos derecho a voz en esta instancia, tanto en los plenos como en las subcomisiones, y creo que todos tenemos la disposición a seguir presente en este proceso guardando prudencia de que esta es la etapa del Consejo, de su instalación, y el inicio de los mecanismos de participación ciudadana.

¿Qué expectativas tiene del trabajo del Consejo y el plebiscito de diciembre?

Me oriento a pensar que sin duda va a ser distinto y mejor que el primer proceso. Por tres razones: la primera, a diferencia del proceso anterior,  el Congreso se puso de acuerdo en que se valoró a los partidos políticos como principales actores del proceso. Con esto, se van a dar fuerzas políticas más o menos ordenadas como bancadas, conglomerados; y eso sin duda va a facilitar la coordinación y el diálogo entre ellos. Segundo, es que ya hubo una experiencia que funcionó muy mal y hay que aprender esas lecciones. En ese sentido, me parece que este consejo electo tiene muy claro que la ciudadanía está bastante hastiada con el tema constitucional, y el objetivo final es que este tema se cierre de buena forma y le haga sentido a la ciudadanía, y eso tiene que ver con el contenido pero también con el comportamiento de todos los actores que estamos involucrados en este proceso. Y por último, es que parte de un texto ya escrito y puesto a disposición, partiendo de una base y que tiene contenidos que marca la forma del debate de opinar sobre un anteproyecto y no pensarlo desde cero.

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