Debido a las torturas sufridas en dictadura.
El 15 de noviembre la Segunda Sala de la Corte Suprema en causa rol N° 157.962-2022 rechazó los recursos de casación en la forma y en el fondo, deducidos por el Consejo de Defensa del Estado en contra de la sentencia dictada por la Corte de Apelaciones de Santiago, la que en consecuencia no es nula.
Cabe tener presente que, en primera instancia, el Séptimo Juzgado Civil de Santiago, en procedimiento ordinario de indemnización de perjuicios hizo lugar a la demanda deducida por Héctor Javier Llaitul Carrillanca, por indemnización de perjuicios por daño moral, contra el Fisco de Chile, condenándolo a pagar a título de daño moral, la suma de $12.000.000, por haber sido víctima de tortura durante la dictadura.
Dicha decisión, fue impugnada ante la Corte de Apelaciones de Santiago y dicho órgano la confirmó. En contra esa sentencia el Consejo de Defensa del Estado, dedujo recurso de casación en la forma y en el fondo.
La Corte Suprema rechazó los recursos interpuestos, haciendo presente que existe el derecho de las víctimas a percibir la compensación pecuniaria correspondiente lo cual implica la reparación de todo daño que se les hubiere ocasionado, lo que se hace posible con la recepción del Derecho Internacional de los Derechos Humanos.
En el caso en concreto, en el contexto histórico en que se verificó el ilícito acreditado, durante un período de extrema anormalidad institucional en el que los agentes que representaban al gobierno de la época abusaron de aquella potestad y representación, produciendo agravios de tanta gravedad como el que aquí se estudia, por lo que el Estado de Chile no puede eludir su responsabilidad legal de reparar dicha deuda de jure.